Nong Khiaw es uno de esos lugares que no siempre aparece en los itinerarios más típicos de Laos, pero que sin duda merece una parada. Un pequeño pueblo a orillas del río Nam Ou, rodeado de imponentes montañas kársticas y envuelto en una atmósfera tranquila y auténtica. Aquí el tiempo parece ir más despacio, las vistas desde los miradores son de otro mundo y la vida local sigue su ritmo sin prisas.
Pasamos dos días en este rincón increíble, explorando su entorno, descubriendo paisajes espectaculares y empapándonos de su esencia. En esta entrada te contamos todo lo que hicimos en estos dos días y por qué Nong Khiaw nos pareció una parada imprescindible en nuestra ruta por el norte de Laos.
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Cómo llegar a Nong Khiaw
Llegar a Nong Khiaw desde Luang Prabang fue más fácil de lo que en un principio nos pensábamos. Preparando el viaje a Laos, nos surgían muchas dudas sobre los traslados. No había manera de obtener información fiable sobre cómo movernos. Lo cierto es que una vez allí, todo resultó ser bastante fácil.
Para llegar a Nong Khiaw solo sale una furgoneta cada día sobre las 8h-9h desde la estación de Naluang de Luang Prabang.
Nosotros compramos el traslado en furgoneta con nuestro alojamiento en Luang Prabang. También se pueden comprar directamente en la estación de furgonetas de Luang Prabang pero mucho cuidado! Como hemos dicho, solo sale una furgoneta al día por la mañana y el tema es que en la furgoneta caben muy pocas personas.
Suerte que ya teníamos los billetes porque en la estación, un par de viajeros que fueron a la taquilla directamente se quedaron sin viajar. El alojamiento se lleva comisión, pero teniendo en cuenta la poca frecuencia y los pocos asientos disponibles, creemos que hicimos lo correcto.
Otro tema fue que nos metimos en seguida dentro de la furgoneta para asegurarnos el sitio, porque lo mismo… suelen vender más billetes de los que caben. Después te arreglan el traslado, acabas llegando pero igual tienes que hacer algún transbordo en otra ciudad y unas cuantas horas de más.
Fue un trayecto de unas 3 horas, e hicimos solo una parada para ir al baño. Cosa que ya nos parecía bien. Al ser una furgoneta pequeña, pueden ir bastante rápido y la carretera estaba en buen estado.
Alojamiento en Nong Khiaw
Llegamos a la estación de furgonetas de Nong Khiaw. Era un sitio muy pequeñito en la misma aldea. Un aparcamiento con un par de furgonetas. Fuimos andando hasta el alojamiento que ya teníamos reservado. Nong Khiaw es muy pequeño, mucho y es muy muy especial. Cambiábamos radicalmente de paisaje y de ambiente. Las calles (o la calle, mejor dicho) sin asfaltar, las casas hechas de madera y la naturaleza era espectacular.
Nos alojamos en Arthith Guesthouse. La habitación daba directamente al río Nam Ou, y tenía un balcón bastante chulo. Lo mejor sin duda era que teníamos unas vistas de postal, idílicas mejor dicho. El río, las montañas kársticas y la niebla baja culminando una imagen preciosa. No os penséis que es un alojamiento de lujo. Era una habitación sencilla, amplia y limpia. Teníamos el desayuno incluido, muy muy bueno. Como os imagináis, recomendamos este sitio muchísimo.
Nang None Mountain View Trail
No llovía, así que no perdimos ni un solo segundo. Después de instalarnos, nos dirigimos directamente a nuestro primer objetivo en Nong Khiaw, el mirador Nang None Mountain View trail.
Desde el alojamiento hasta el punto de inicio del trekking, no podíamos dejar de admirar el paisaje de Nong Khiaw y la vida en la aldea, estaba la cosa de lo más entretenida. Cruzamos el puente que separa las dos orillas del río Nam Ou. Este puente era el punto de encuentro de adolescentes, niños y niñas que formaban corrillos y se divertían de la manera más inocente. Además las vistas a las montañas desde el puente eran magníficas.
El inicio del trail se encuentra unos cuantos metros después de cruzar el puente. Está marcado con un cartel pero hay que estar un poco atento porque no es que sea muy vistoso.
Empezamos a subir y aunque ya lo sospechábamos, el camino estaba bastante embarrado. Lo bueno es que el terreno tenía bastante zona de piedra y roca libre de barro y a medida que íbamos ascendiendo, la cosa iba mejorando. No es un subida difícil a nivel técnico, pero hay que tener fondo porque el desnivel es muy considerable.
Otra precaución que hay que tomar en el norte de Laos es cubrirse bien el cuerpo para evitar que se enganchen sanguijuelas. Habían muchas y la verdad que eran muy desagradables. Nosotros ya nos habíamos estrenado con las sanguijuelas en Sumatra donde se me engancho una y es una experiencia bastante incómoda. Lo bueno es que no me di cuenta hasta después de un montón de horas cuando llegué al alojamiento y se cayó ella solita después de empacharse con mi sangre. Eso sí, me dejó un agujero considerable.
En la cima de Nang None Mountain View
Una vez arriba nos encontramos con estas impresionantes vistas.
Nos sorprendió lo bien arregladito que tienen el mirador teniendo en cuenta que el camino estaba bastante desaparecido. Había una plataforma de madera que estaba muy bien cuidada con la bandera de Laos para hacer la imagen un poco más instragamer.
Nos quedamos bastante rato, primero para descansar de la subida pero, sobre todo, porqué las vistas eran absolutamente extraordinarias. Por un lado, teníamos la aldea de Nong Khiaw bañada por el río Nam Ou y, al otro, las imponentes montañas cubiertas de selva en la falda del río.
La bajada fue un poquito más complicada que la subida porque la cosa estaba muy resbaladiza. De vuelta, nos paramos un ratito en el puente de separa las dos orillas de Nong Khiaw. Que maravilla de lugar… las vistas desde el mirador eran espectaculares pero es que allí mismo, mirábamos a nuestro alrededor y todo era así de emocionante.
Ya oscurecía y volvimos a nuestro alojamiento para quitarnos todo el barro que teníamos encima. Lo bueno es que el baño de la habitación tenía un pequeño calentador y pudimos disfrutar de agua caliente. Desde el balcón de nuestra habitación, no podíamos dejar de admirar las vistas que teníamos. Eran inmejorables.
Nong Khiaw: Trekking hasta Ban Huai Lek
Al día siguiente, nos despertamos y lo primero que hicimos fue salir al balcón a disfrutar de este paraíso. Nos podríamos acostumbrar a estas vistas sin problema.
Teníamos el desayuno incluido y, lo confesamos, nos pusimos las botas. Estaba todo delicioso. Lo preparaban allí mismo al momento, en especial, los smothies estaban espectaculares. Nos lo tomamos con calma.
Hoy íbamos a hacer un trekking que atravesaba aldeas, arrozales y paisajes que fueron impresionantes!! Como ya imaginábamos, no decepcionó en absoluto. En total estuvimos unas 5 horas ida y vuelta. No es un trekking exigente, si le dedicamos tanto tiempo fue porque era todo precioso y nos entretuvimos muchísimo haciendo fotos, y disfrutando con mucha calma de todo lo que íbamos descubriendo. Llevamos provisiones de comida para ir sin prisas.
Trekking hasta Ban Huai Lek
El trekking iba en paralelo a la carretera que salía del pueblo hacia la montaña, así que no fue muy difícil orientarnos. Cruzamos de nuevo el puente y pasamos por delante del inicio del trail del mirador que hicimos el día anterior. Fuimos siguiendo y nos adentramos en campos de arroz. Nuestra primera parada fue Pathok caves.
El exterior de las cuevas Pathok es impresionante. Nosotros no entramos dentro de las cuevas porque no había ninguna estructura, ni seguridad ni nada y siendo época de lluvias, no nos quisimos arriesgar. De hecho, uno de los puentes que se adentraba en una cueva, estaba destrozado. Eso sí, sobrecogedoras las montañas y todo el paraje de este lugar. Sensacional.
Continuamos andando, cruzando diminutas aldeas, observando el arduo trabajo en las plantaciones y arrozales y emocionándonos con las imágenes que regala la naturaleza en esta parte del mundo.
Seguimos caminando unas cuantas horas más hasta que llegamos hasta Ban Huai Lek. Una diminuta aldea donde hicimos un pequeño descanso. Aquí decidimos dar media vuelta y regresar a Nong Khiaw. También teníamos ganas de disfrutar de Nong Khiaw y queríamos llegar antes de que empezara a oscurecer. Y, así lo hicimos.
Acabamos el día paseando por Nong Khiaw y fuimos a cenar a un pequeño restaurante. La comida no era nada del otro mundo, pedimos dos platos sencillos y disfrutamos tranquilamente del entorno.
De Nong Khiaw a Muang Ngoy
Ya que habíamos llegado hasta la alejada localidad de Nong Khiaw, aprovechamos para alejarnos todavía más y pasamos unos cuantos días en la diminuta aldea de Muang Ngoy. Y ya os avisamos que fueron unos días inolvidables. Para llegar a Muang Ngoy desde Nong Khiaw, hicimos un trayecto en barca cruzando el río Nam Ou con unos paisajes de fondo impresionantes. Los traslados en el norte de Laos son siempre una buena parte del viaje.
Siguiente etapa…
Al día siguiente dejábamos Nong Khiaw y nos íbamos a Muang Ngoy. Uff qué sitio! Muang Ngoi fue nuestro top del viaje. Una aldea remota, alejados del mundo, sin demasiadas comodidades pero con un paisaje absolutamente brutal. No te pierdas todos los detalles en la siguiente entrada:
# Muang Ngoy: qué ver y hacer en esta joya escondida de Laos
Final de nuestro paso por Nong Khiaw
Esperamos que este recorrido por Nong Khiaw te haya inspirado a conocer uno de los lugares más auténticos del norte de Laos. Si tienes preguntas, dudas o algo que compartir sobre tu experiencia en este rincón de naturaleza pura, ¡déjanos un comentario! Tu opinión y consejos siempre serán bienvenidos para seguir ayudando a otros viajeros.
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