Hoy visitábamos uno de los lugares más imprescindibles de isla norte de Nueva Zelanda, Wai-O-Tapu. Wai-O-Tapu se trata de una de las zonas con más actividad geotérmica del planeta. Géysers, hotsprings, pozas humeantes, aguas teñidas de minerales de colores imposibles y un sinfín de peculiaridades. Es un rincón único e inolvidable. Te contamos todos los detalles en esta entrada. ¿Nos acompañas?
Anteriormente…
El día anterior habíamos empezado nuestra aventura por Nueva Zelanda visitando las impresionantes Waitomo Caves. Unas cuevas que recorrimos completamente a oscuras iluminadas solo por la luz que desprenden las luciérnagas. Una experiencia increíble para empezar un viaje increíble! Si todavía no la has leído, no te puedes perder esta entrada!
Día 2. Auckland-Waitomo caves–Rotorua
Contents
Sorpresas de viajar en campervan por Nueva Zelanda
Madrugamos mucho porque queríamos aprovechar al máximo el día! De hecho después de visitar Wai-O-Tapu, todavía nos quedaban un montón de kilómetros hasta el siguiente destino…No nos adelantemos!
Nos despertamos en nuestra campervan y nos encontramos con una sorpresita de buena mañana. Todos los cristales de la campervan estaban completamente congelados. Lo cierto es que había hecho un frío terrible por la noche, cosa que ya habíamos notado… Como era imposible empezar a conducir con los cristales cubiertos de hielo, tuvimos que entrar en el hostel a buscar agua caliente. Suerte que habíamos madrugado porque tuvimos que dedicarle un buen ratito…
Como explicamos en la entrada del día anterior, dormimos en el recinto del Hostel Base. Aparcamos en el estacionamiento que tienen para campers y pudimos utilizar todos los servicios del hostel como la cocina, duchas, etc.
Con todo solucionado, por fin pusimos rumbo a Wai-O-Tapu.
A medida que nos íbamos acercando, la carretera y el paraje que envolvía la zona era impresionante! Una intensa niebla cubría todo el territorio y le daba un aire de misterio fascinante.
Wai-O-Tapu abrían a las 8 de la mañana pero nosotros llegamos un poco antes, así que aprovechamos para visitar los alrededores y, como no, hacer mil fotos!
Precio y visita de Wai-O-Tapu
PRECIO: 35$/persona
A las 8 en punto de la mañana abrían las puertas de Wai-O-Tapu. Por fin, entrábamos en el impresionante parque de Wai-O-Tapu. Sin palabras!
Wai-O-Tapu era toda una experiencia para los sentidos. El fuerte olor a azufre, las pozas de agua hirviendo y los contrastes de colores nos tenían impresionadxs. Toda esta composición de debe a que la riqueza de minerales de la región volcánica de Taupo se concentra en Wai-O-Tapu y produce tonalidades de colores fascinantes.
El recorrido por el interior del parque es muy largo, así que le dedicamos bastante tiempo. Pero a las 10.15h hacían explosionar un géyser que está localizado fuera de las instalaciones y por supuesto no nos lo queríamos perder. Tuvimos tiempo de sobra de recorrer todo el parque porque entramos nada más abrir las puertas, de hecho éramos los únicos visitantes.
El paraje que rodea Wai-O-Tapu era muy impresionante. Salía vapor de agua de cada rincón del suelo y en contraste con el frío que hacía todo estaba envuelto por una densa niebla. El paisaje era fascinante. Casi de otro planeta. Eso sí, el olor a azufre era muy fuerte. Había tramos en los que incluso se nos hacía bastante molesto!
Una pequeña recomendación para Wai-O-Tapu…
Vale la pena llegar pronto a Wai-O-Tapu para poder visitarlo completamente solxs. En especial, si vuestro viaje coincide con el verano, donde aumentan los visitantes.
Nosotros como fuimos en su invierno, no tuvimos problemas con aglomeraciones. De hecho, no había casi nadie en ningún sitio. Y siempre hacíamos las visitas solos. Esto fue lo mejor del viaje.
Explosión del géiser en Wai-O-Tapu
A las 10.15h hacían reaccionar uno de los géysers que había fuera de las instalaciones. Uno de los trabajadores del parque hacía una breve explicación sobre el funcionamiento y la reacción del géiser. Después, para hacerlo explosionar, lanzaban dentro un jabón ecológico que, según nos explicaron, hacía que reaccionara y explosionara.
Estaba todo un poco preparado y eso, la verdad, que le quitaba un poquito de encanto al acto en si. Pero nosotros que estábamos encantados de la vida de estar en Nueva Zelanda, todo nos parecía maravilloso. Evidentemente no es lo mismo que estar en los géysers del Tatio en el desierto de Atacama donde los géysers expulsaban agua de forma totalmente espontanea.
Lo que sí que tenemos que decir que la explosión dura muchísimo tiempo. De hecho, nosotros nos fuimos al cabo de media hora y todavía continuaba.
Después de visitar Wai-O-Tapu, salimos del parque y visitamos la localidad donde se encuentra, Rotorua. Lo primero que hicimos fue dirigirnos al I-Site de Rotorua para informarnos y también para reservar nuestra siguiente visita…
Rotorua, visita al I-Site.
Como os hemos dicho, volvimos al pueblo de Rotorua antes de continuar con la ruta. Comimos delante del lago (todo en plan idílico). Era un lugar super agradable donde se podía aparcar la caravana. Además, como hacía muy buen día (solecito), comimos los espaguetis fuera de la campervan delante del lago. Mejor comida y mejor lugar, imposible!
Por la tarde, fuimos al punto de información de Rotorua, conocido como I-SITE. Los I-Sites son los centros de información turística y hay uno en cada localidad de Nueva Zelanda. Un lugar MUY útil que tiene que ser la primera parada en cada ciudad o pueblo. Donde os atenderán maravillosamente. Por cierto, en el I-Site de Rotorua tienen un también servicio de cambio de divisa donde no cobran comisión. De hecho, fue el mejor cambio que encontramos en todo el viaje.
Nosotros en esta ocasión fuimos para pedir información sobre White Island. La mujer que nos atendió hizo todos los trámites por nosotros para visitar White Island. Reservó toda la excursión y también el camping en Wakatane, el pueblo desde donde salen las barcas a White Island. Lo hacen de manera gratuita ya que es un servicio público. Nos fue de muchísima ayuda porque reservar la excursión a White Island es un poco complicado.
PRECIO: White Island $195/persona y el camping de Wakatane $15 los dos.
Wakatane, más cerca de White Island
Después de unos cuantos kilómetros atravesando paisajes impresionantes a lo largo de la isla norte, llegamos al camping que habíamos reservado en el pueblecito costero de Wakatane. Y sabéis que nuestro objetivo era el volcán White Island.
Llegamos al camping y ya nos estaba esperando el propietario. Como en todos los camping en los que estuvimos, éramos los únicos huéspedes. El camping era gigante y con un montón de servicios. Nos encantó!
Después de instalarnos, fuimos a dar un paseo por el pueblo. Vimos mucha gente local que iba descalza por la calle. En Nueva Zelanda es muy común hacerlo. Para ellos es una manera de estar en contacto directo con la Tierra. Esto también lo vimos en alguna ocasión en Costa Rica.
Dentro del pueblo (que daba un poco de miedito porque éramos los únicos humanos por la calle) nos encontramos con unas mini cascadas preciosas. La naturaleza se cuela por cualquier rincón de la isla.
Siguiente etapa…
En principio, teníamos la excursión reservada para el día siguiente a White Island. Pero como se trata de un volcán activo no la teníamos 100% confirmada. En White Island no vive nadie pero tienen diferentes receptores para controlar la actividad volcánica. Como la zona es muy inestable, nos tenían que llamar por teléfono esa misma noche para confirmar que finalmente sí que podríamos ir. A última hora de la noche nos comunicaron que SÍ! Lo estábamos deseando!
⇒Día 4. White Island – Wakatane – Taupo
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